En el plan estratégico de Nibali para ganar el Giro no figuraba Carapaz como un rival serio. De otra manera no se entiende cómo ayer le regalaron más de 1:30 segundos en unos kilómetros.
Roglic tampoco lo tenía en la lista de sus rivales. Una vez Dumoulin por una lamentable caída tuvo que retirarse del Giro, el esloveno se centró casi que exclusivamente en el tiburón.
Y probablemente antes de Giro en la lista de los grandes favoritos de ningún experto y menos de las casas de apuestas aparecía Richard Carapaz.
Yo tampoco lo tenía en mi lista de favoritos. Luego de su brillante cuarto puesto en el Giro 2018, Carapaz no había tenido ninguna actuación que justificara incluirlo como favorito. Ciertamente yo lo tenía en mi lista de outsiders y favorito para ser Top 10. Es que este Giro tenía un elenco fabuloso.
Las primera alas a Carapaz se las ha dado el destino que eliminó a dos grandes favoritos: Tom Dumoulin y Egan Bernal. Con ello Richard ha tenido más libertad porque hay dos equipo menos para controlar el Giro.
Las otras alas se las dado su equipo Movistar que muy inteligentemente ha jugado con sus bazas, Landa y Carapaz.
Hay que reconocer que sencillamente con la CRI inicial los favoritos ya vieron a Carapaz muy limitado. En 8 kilómetros perdió 47 segundos con Roglic y 23 con Nibali.
Luego en la etapa 3 por mala suerte Carapaz perdió otros 46 segundos.
Pero la suerte rápidamente le devolvió lo que le había quitado y en la etapa 4, el día del desastre de Dumoulin, el ecuatoriano se encontró en el grupo de punta y fabulosamente bien ganó la etapa. Allí sacó tiempo a Nibali y a los otros favoritos menos a Roglic.
Ya era un golpe de alerta nítido que ni Nibali ni Roglic tuvieron en cuenta para hacer ajustes a su plan estratégico.
Y eso que en la CRI confirmó que estaba en una muy buena forma.
Probablemente la etapa 12, como mostró signos de debilidad subiendo, lo hizo casi invisible para los dos grandes favoritos Roglic y Nibali.
Ahora ha asestado dos golpes maestros, y vuela como líder con una confianza que asombra.
Falta mucho Giro, y hay etapas donde se puede perder todo lo ganado hasta ahora.
Como diría mi querido hermano que amaba mucho el ciclismo, se les creció el enano Carapaz a Nibali y a Roglic. Por encima de López, Simon Yates o Mikel Landa, los dos máximos favoritos tiene ahora a un Richard Carapaz que impresiona.
La etapa 16 es monstruosa a pesar de que se subirá el majestuoso Gavia. Ya veremos allí más claro.
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